Bursitis, una causa frecuente de dolor en el hombro






La Bursitis es una causa frecuente de dolor articular tras un movimiento o traumatismo brusco, es debida a la lesión de una estructura conocida como bolsa serosa.


La Bursitis es una lesión de una estructura que se conoce como bolsa serosa, espacio lleno de líquido recubierto por una fina membrana que se encuentra entre los músculos y tiene como función actuar como una especie de lubricante durante los movimientos para disminuir la fricción.  

Cuando ocurre un movimiento brusco, los músculos se contraen violentamente y la bolsa se rompe derramándose el líquido de su interior y produciéndose gran inflamación. Esto es lo que se conoce como Bursitis, suele ser más frecuente en el hombro y la cadera.  Además de los traumatismos la Bursitis puede producirse acompañando a otras enfermedades, también puede resultar del uso excesivo de una articulación.  

Si no se trata apropiadamente puede presentar agravaciones episódicas o volverse crónica, en ocasiones puede limitar notoriamente los movimientos del hombro produciendo el llamado hombro congelado. 





La Bursitis suele producirse con mayor frecuencia en la articulación del hombro, sin embargo también puede presentarse en la rodilla y la cadera.  

Adoptar posturas correctas al llevar a cabo las distintas actividades es la mejor forma de prevenir la aparición de una bursitis, sin embargo, cuando esta ocurre puede adoptarse una serie de medidas para aliviar los síntomas y ayudar a reparar el daño, como son:

  • Reposo, evite movilizar la articulación afectada.
  • Coloque hielo local en el área dolorosa durante las primeras 48 horas, puede usar para ello una compresa de gel frío o puede masajear suavemente con una piedra de hielo, en ambos casos aplique el frío por espacio de unos 10 minutos varias veces al día.
  • Pasadas las 48 horas puede aplicar calor local, preferiblemente calor húmedo con una compresa o paño humedecidos en agua tibia.
  • Medicación, es necesario acudir a un especialista para que lo evalúe y establezca la magnitud de la lesión, seguramente le prescribirá analgésicos, antiinflamatorios y un esquema de rehabilitación.


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